El segundo de los cuatro principales instrumentos científicos del telescopio espacial James Webb de la NASA, el Mid-Infrared instrument (MIRI), ha concluido sus preparativos posteriores al lanzamiento y ya está listo para obtener datos científicos.
Se ha verificado la capacidad del MIRI para realizar imágenes coronagráficas, que utiliza dos estilos diferentes de máscaras que bloquean la luz de las estrellas para que esta no llegue a los sensores cuando se realicen observaciones de los planetas en órbita. Estas máscaras permitirán que los científicos puedan detectar exoplanetas directamente, así como estudiar los discos de polvo alrededor de sus estrellas anfitrionas.
Junto con los otros tres instrumentos del Webb, el MIRI inicialmente se enfrió a la sombra del parasol (del tamaño de una cancha de tenis) de Webb a unos 90 grados Kelvin. Para poder realizar los estudios científicos la temperatura se rebajó mediante el uso de un enfriador criogénico alimentado eléctricamente, a menos de 7 Kelvin, solo unos pocos grados por encima de la temperatura más baja que puede alcanzar la materia. Esta temperatura de funcionamiento tan extrema permite que el MIRI proporcione imágenes y espectros de infrarrojo medio con una calidad sin precedentes de nitidez y sensibilidad.
“Estamos encantados de que el MIRI ya sea un instrumento funcional y de última generación con todas sus capacidades mejor de lo esperado. Nuestro equipo multinacional de puesta en marcha ha hecho un trabajo fantástico al preparar al MIRI en tan solo unas pocas semanas. Ahora felicitamos a todas las personas, científicos, ingenieros, gerentes, agencias nacionales, ESA y NASA, que han hecho realidad este instrumento. El MIRI comenzará a explorar el universo infrarrojo en formas y profundidades nunca antes alcanzadas”, dijo Gillian Wright, Investigador principal europeo del MIRI en el Centro de Tecnología de Astronomía del Reino Unido, y George Rieke, líder científico del MIRI en la Universidad de Arizona. El MIRI se desarrolló gracias a una colaboración entre la NASA y la ESA (Agencia Espacial Europea), con el Jet Propulsion Laboratory (JPL) de la NASA y un consorcio multinacional de institutos astronómicos europeos contribuyendo para la ESA.
Con las actividades de puesta en marcha posteriores al lanzamiento del NIRISS y el MIRI ya concluidas, el equipo del Webb seguirá centrándose en comprobar los dos modos restantes en sus otros instrumentos. El telescopio espacial James Webb de la NASA, fruto de una colaboración con la ESA (Agencia Espacial Europea) y CSA, proporcionará sus primeras imágenes a todo color y datos espectroscópicos el 12 de julio de 2022.
Edición: R. Castro.